martes, 22 de mayo de 2012

En un bar


Los hombres se encontraron, mera casualidad, en el bar. Uno de ceño triste. El otro con algo de ira. El primero llego después. El otro guardaba siempre en su saco una navaja. En el bolsillo derecho; era diestro. Sus miradas se cruzaron entre el resto de los allí presentes. El diestro metió rápido su mano en el saco, y mas rápido aun se fue encima del otro. Le dio tres puñaladas certeras, y aunque la primera le mato, descargo su rabia ferozmente. El diestro, de manos ensangrentadas, se fue despacio del bar. Lento. Sabe que ahora carga con dos muertos.

domingo, 20 de mayo de 2012

Nubes

Me gustan las nubes con actitud. Blanquisimas en el mas soleado enero, o en gris plateado de tormenta. Estas nubes de tormenta son las que mas atractivas me resultan. Aparecen desde el horizonte imponiéndose al sol del día, o a ese campo de titilantes estrellas nocturnas. En la tarde, a la hora del cenit, veo como esas nubes de tormenta se devoran a trocitos lo que va quedando de luz. Con imponente presencia. Con altanería. No son nubes tímidas, apagadas. Llegan con el estruendo del trueno, vociferando su poder. Llegan con relámpagos atrevidos y furiosos. Estas nubes son las que mas me gustan.

La noche oscura

Resulta que estoy en mitad de la noche
En sus entrañas
Bañado de negrura
Una noche sin luna
Sin luz
Estoy sordo
Nada entre la espesa noche y yo
Deseo caminar lejos
Andar pasos veloces
Pero la oscuridad no me lo permite
Me encuentro mudo
Las palabras, los sonidos temerosos no se atreven
Nada quiere salir a la oscura noche
Quisiera música
Estoy ansioso
Mi respiración se agita
Mis manos sudan
La noche me abraza
Aterradora noche oscura